¿Estás buscando una receta de tarta de queso al horno a prueba de tontos, fácil de seguir y que te haga la boca agua? ¡No busques más! Esta receta de tarta de queso clásica al horno promete un capricho indulgente perfecto para cualquier ocasión.
Este delicioso postre combina la rica cremosidad de una tarta de queso clásica con el satisfactorio crujiente de una mantequillosa base de galletas. Hecha con ingredientes sencillos y pasos fáciles de seguir, esta receta de tarta de queso al horno es un delicioso capricho que sin duda impresionará. Vamos a preparar una deliciosa y cremosa tarta de queso horneada.
Ingredientes para la tarta de queso horneada
Para empezar, necesitarás los siguientes ingredientes clave para tu tarta de queso horneada:
Para la base:
– 1 y 1/2 taza de galletas graham trituradas
– 1/4 taza de mantequilla derretida
Para el relleno de la tarta de queso:
– 2 paquetes de queso crema, ablandados
– 1/2 taza de azúcar
– 1 cucharadita de extracto de vainilla
– 2 huevos grandes
Cómo hacer la tarta de queso horneada
1. Precalienta el horno a 175°C (175°C).
2. Para hacer la base, mezcla las galletas graham trituradas y la mantequilla derretida en un bol mediano. Usa un tenedor para mezclar hasta que las migas estén uniformemente recubiertas de mantequilla derretida.
3. Presiona la mezcla de migas en el fondo de un molde desmontable de 23 cm (9 pulgadas), creando una capa uniforme. Coloca el molde en el horno precalentado y hornea durante 10 minutos, o hasta que la base esté dorada. Saca el molde del horno y déjalo enfriar ligeramente.
4. Para hacer el relleno, bate el queso crema con la batidora eléctrica hasta que esté suave. Añade el azúcar y la esencia de vainilla, y continúa batiendo hasta que estén bien mezclados. Añade los huevos y bate hasta que estén completamente incorporados, raspando los lados del bol si es necesario.
5. Vierte el relleno de queso sobre la base y alisa la superficie con una espátula.
6. Hornea la tarta de queso en el horno precalentado durante 45-50 minutos, o hasta que los bordes estén cuajados y el centro esté ligeramente tembloroso.
7. Saca la tarta de queso del horno y déjala enfriar a temperatura ambiente.
Servir la tarta de queso horneada
Una vez fría, cúbrela con film transparente y déjala enfriar en la nevera durante al menos 3 horas, o toda la noche.
Cuando estés listo para servirla, sácala de la nevera y retira los lados del molde desmontable. Córtala en porciones y sírvela con tus ingredientes favoritos, como bayas frescas, salsa de chocolate o nata montada.
Consejos para hacer la tarta de queso horneada
– Asegúrate de utilizar queso crema a temperatura ambiente, ya que esto facilita la mezcla y da como resultado un relleno más suave.
– Para un capricho más decadente, considera la posibilidad de utilizar galletas graham de chocolate para la base. – Para asegurarte de que el pastel de queso está perfectamente cocido, evita hornearlo en exceso. Cuando lo saques del horno, el centro debe estar ligeramente tembloroso.
– Al cortar la tarta de queso, considera la posibilidad de utilizar un cuchillo caliente para ayudar a crear bordes limpios.
En Conclusión…
Esta fácil receta de tarta de queso horneada se convertirá sin duda en un postre imprescindible para cualquier ocasión. Con su textura cremosa e indulgente, esta clásica tarta de queso horneada es perfecta para impresionar a tus amigos y familiares. Así que, ¡adelante! Y date un delicioso capricho con una exquisita porción de esta deliciosa tarta de queso horneada.